El bookazine de RS sobre el Flaco revela la historia de la guitarra que Luis Alberto le regaló a Pappo y que el Carpo vendió.
En 1969, después de que saliera el primer disco de Almendra, el bajista Emilio Del Guercio y el guitarrista Edelmiro Molinari viajaron a Nueva York para comprar instrumentos para lo que iba a ser la presentación de la ópera de Almendra (el proyecto nunca se llegó a concretar), y volvieron con equipos Marshall, una Gibson SG y una Gibson Dove, una guitarra acústica con la que Luis Alberto Spinetta grabó el álbum doble Almendra II al año siguiente y a la que, años después, se refirió como "la guitarra con la que compuse las canciones más hermosas que hice para Almendra".
En 1971, tras la separación del grupo y antes de viajar a Europa con Héctor "Pomo" Lorenzo, como un acto de amistad Luis le regaló la Gibson a Pappo, que la vendió a los pocos días. Desde entonces, nunca más se había sabido sobre el destino de esta guitarra.
Más de cuarenta años después, el bookazine sobre Spinetta que acaba de lanzar Rolling Stone (con análisis profundos de sus etapas sonoras y bandas clave, críticas de sus 100 Grandes Canciones, fotos históricas, manuscritos, dibujos y sus guitarras más emblemáticas) revela la aparición y la historia de la Gibson Dove, uno de los mitos urbanos más transitados del rock nacional.
¿Qué pasó? Después de que Spinetta se la regalara, Pappo se la dio a Alfredo Toth (ex Los Gatos) como parte de pago por una Gibson Les Paul negra y, un año más tarde, Toth se la vendió a Jorge Maronna, uno de los integrantes de Les Luthiers. "La usé durante muchos años en vivo en nuestros espectáculos, también para componer en casa y para grabar algunas cosas", cuenta Maronna. "Es una guitarra muy bonita, con un sonido muy límpido y una afinación perfecta."
Maronna y Spinetta se habían cruzado un par de veces un el restaurante japonés al que Luis solía ir. "Nunca llegamos a hablar, sólo una vez nos saludamos de lejos con un gesto", recuerda Maronna.
En 2012, viendo un programa especial tras la muerte de Spinetta, Maronna se enteró de que su Gibson Dove era la viola perdida que el Flaco le había regalado a Pappo y que nadie sabía a dónde había ido a parar, así que se puso en contacto con Dante para contarle que la tenía él. "Yo estaba de gira. Charlamos un rato y le ofrecí verla cuando quisiera."
En 1969, después de que saliera el primer disco de Almendra, el bajista Emilio Del Guercio y el guitarrista Edelmiro Molinari viajaron a Nueva York para comprar instrumentos para lo que iba a ser la presentación de la ópera de Almendra (el proyecto nunca se llegó a concretar), y volvieron con equipos Marshall, una Gibson SG y una Gibson Dove, una guitarra acústica con la que Luis Alberto Spinetta grabó el álbum doble Almendra II al año siguiente y a la que, años después, se refirió como "la guitarra con la que compuse las canciones más hermosas que hice para Almendra".
En 1971, tras la separación del grupo y antes de viajar a Europa con Héctor "Pomo" Lorenzo, como un acto de amistad Luis le regaló la Gibson a Pappo, que la vendió a los pocos días. Desde entonces, nunca más se había sabido sobre el destino de esta guitarra.
Más de cuarenta años después, el bookazine sobre Spinetta que acaba de lanzar Rolling Stone (con análisis profundos de sus etapas sonoras y bandas clave, críticas de sus 100 Grandes Canciones, fotos históricas, manuscritos, dibujos y sus guitarras más emblemáticas) revela la aparición y la historia de la Gibson Dove, uno de los mitos urbanos más transitados del rock nacional.
¿Qué pasó? Después de que Spinetta se la regalara, Pappo se la dio a Alfredo Toth (ex Los Gatos) como parte de pago por una Gibson Les Paul negra y, un año más tarde, Toth se la vendió a Jorge Maronna, uno de los integrantes de Les Luthiers. "La usé durante muchos años en vivo en nuestros espectáculos, también para componer en casa y para grabar algunas cosas", cuenta Maronna. "Es una guitarra muy bonita, con un sonido muy límpido y una afinación perfecta."
Maronna y Spinetta se habían cruzado un par de veces un el restaurante japonés al que Luis solía ir. "Nunca llegamos a hablar, sólo una vez nos saludamos de lejos con un gesto", recuerda Maronna.
En 2012, viendo un programa especial tras la muerte de Spinetta, Maronna se enteró de que su Gibson Dove era la viola perdida que el Flaco le había regalado a Pappo y que nadie sabía a dónde había ido a parar, así que se puso en contacto con Dante para contarle que la tenía él. "Yo estaba de gira. Charlamos un rato y le ofrecí verla cuando quisiera."
No hay comentarios:
Publicar un comentario